Historias de ansiedad y depresión. Por Cristian Figueredo Braslavsky

Mas allá de la forma en que sale a la luz el malestar y se deja ver de forma inevitable, lo que siempre ha despertado mi interés es la pregunta sobre el origen. Esa inquietud del porqué de las cosas fue la que me llevó a estudiar psicología y psicoanálisis, para luego convertir esa búsqueda en mi profesión.

Hace casi 20 años que escucho lo que hay detrás del sufrimiento y es justamente que en el despliegue de las historias de cada uno que sufre donde podemos comenzar a comprender algo de el porque de ese sufrimiento. Es muy importante que en el tratamiento de los síntomas se apunte a lo que a dado lugar a esa construcción.

Son diferentes los motivos y razones que empujan a una persona a acudir a la consulta en un momento donde el sufrimiento toma una forma insoportable, o cuando sin saber muy bien de que se trata, algo irrumpe en la vida en forma de inhibición, de una imposibilidad de salir de ese lugar oscuro.

Si bien el deseo de que el síntoma desaparezca es licito y lógico, lo que puede de algún modo hacer que ese deseo encuentre la buena forma de tomar cuerpo, es el comprender algo de su funcionamiento y origen para tener la posibilidad de hacer de otra forma con el.

Así se puede ver en la nota publicada en el periódico La Vanguardia, acerca de una entrevista a la joven cantante Billie Eilish, quien abre algo de su relato sobre los síntomas que le aquejan como la ansiedad, la depresión, la soledad, las autolesiones y los vómitos.

Comparto la publicación porque deja abierta una puerta a lo que hay detrás de lo que se ve, porque siempre hay una historia que contar de cada sufrimiento y eso puede permitir una nueva forma de leer lo que ya pasó…

ENLACE A LA NOTA EN LA VANGUARDIA