Apuntes de la sesión clínica sobre Delirio & Defensa. Por David Baytelman

Aquí algunos apuntes sobre lo tratado en la sesión clínica del 18 de Enero.

La reunión gira en torno a algunos casos surgidos en la práctica, en donde aparecen elementos estructurales que hacen pensar en la psicosis y de cómo ofrecer un tratamiento posible.

Vimos cómo esta estructura propone el desafío y la delicadeza de no añadir más sentido en donde ya hay un exceso de éste. Lacan, a partir de su práctica, sugiere un modo “cómo un secretario”, recogiendo el relato y el conocimiento de ese exceso. Este desafío tendrá que apuntar a poder generar un arreglo a la medida del sujeto. Arreglo que le permita anudarse de un modo que le permita estar mejor.

Es aquí donde surge lo interesante ya que, en el caso de la psicosis, cuando la persona acude a consultar, algo de eso ha fallado. Ese arreglo ya no funciona y aparece lo que no está en relación a los demás o en relación al propio cuerpo. Habrá que escuchar y estar atento a los sutiles detalles que permiten al sujeto tramitar algo de eso que no funciona, del malestar. Para, a partir de ello, poder generar algo nuevo que funcione.

Lo interesante está en que de alguna forma todos tenemos que buscar un arreglo a la medida del sujeto, a la medida de cada uno, y en ese sentido, cómo dice Lacan todos deliramos. Cabe destacar que aquí el delirio se entiende cómo un intento de ese arreglo y por lo tanto algo a tener en cuenta en relación a la función que cumple. Es delicado cuestionarlo de entrada.

Se podría decir que la diferencia estructural en el tratamiento está en si el sujeto podrá integrar y aprovechar un sentido añadido como es la interpretación.

Al hablar de los casos fueron apareciendo estos sutiles detalles que ofrece cada caso y que nos permiten aprender de ellos. Cómo cada tratante recoge lo que trae el paciente para inventar algo que lo anude y lo sujete.